La madera ha acompañado a la humanidad toda la vida y hoy continúa siendo un imprescindible en nuestro día a día, así que debemos mantener este material muy cuidado para que dure mucho tiempo.
La madera nos hace reconectar con la naturaleza, nos aporta amabilidad y calidez. Con ella queremos extender el entorno hasta el interior de nuestros templos. Hay diferentes tipos de madera que son más resistentes (aunque más lentas) que otras.
¿Cómo debo cuidar la madera?
El tratamiento de la madera depende del tipo de material y árbol del que proceda, aunque existen características clave a la hora de hacer perdurar este aliado milenario. ¿Quieres saber cuáles?
Limpieza de la madera
Para potenciar el acabado de tus muebles de madera, es recomendable aplicar una combinación de aceite de oliva y limón. Esta mezcla no daña el conjunto, aunque sí recomendamos no empapar el mobiliario. Puedes aplicar la mezcla usando un cepillo de dientes viejo en las áreas difíciles de alcanzar y limpiar la superficie con toallitas.
Barnizar la madera
A la hora de elegir el mejor barniz dependerá del acabado que deseemos. Puedes elegirlo en función del tipo de madera, transparente o satinado y brillante. Si te dispones a dar nueva vida a tus muebles de madera, el barniz más recomendable es el de agua, ya que es fácil de aplicar y el resultado es muy convincente. Para los muebles de exterior, es mejor elegir un barniz sintético que proteja la pieza de los rayos de sol y la lluvia. En el caso de los muebles barnizados, es mejor aplicar una mezcla de agua y jabón neutro para limpiarlos.
Protección contra el sol
Las temperaturas altas y el impacto de los rayos de sol pueden ser muy perjudiciales para los muebles de madera, ya que se decoloran o pueden perder su acabado. Especialmente si hablamos de muebles de madera de exterior, lo mejor es utilizar telas para cubrirlos durante las épocas en las que no hagamos un uso prolongado de los mismos. Como alternativa, la opción más cómoda consiste en aplicar barnices específicos para reforzar su estética y durabilidad. Porque todo empieza en la madera, pero solo de nosotros depende que su magia dure para siempre.
Como ves, para que este material te dure toda la vida solo necesita unos cuidados usuales donde darle unos mimos. ¡Ya verás cuánto tiempo te dura en perfecto estado!